San Jorge y la rosa

sant jordi 1Un padre de familia a quien conocí, me contaba:

Por San Jorge compro tres rosas: una para mi esposa, otra para mi hija pequeña y la tercera para un chico que padece una minusvalía psíquica desde su nacimiento. Se llama Narciso.
Nos encontramos en la calle. Le digo:
¡Buen día Narciso! ¡Hoy es San Jorge!
Él no puede hablar. Me contesta con sonidos guturales:
“Sí, sí”. Y le ofrezco una rosa.

Narciso empezó a dar saltos de alegría, como un niño pequeño. Con la rosa en la Continua llegint